miércoles, 27 de noviembre de 2013

Sobre ciertos ignorantes que se las dan de cultos


Sin abandonar su actitud pendenciera, el payador adopta un tono didáctico y explica que es correcto decir «presidenta», con «a», cuando se habla de Cristina y de Dilma y de toda mujer que preside.


Aburrío de escuchar
y leer en varios laos
que se dice «presidente»
y que está mal «presidenta»,
pa designar la mujer
que preside una asamblea,
un gobierno o lo que sea,
decidí ir a las juentes,
autoridades atuales,
y eso sí, pa no dormirme,
busqué gente un poco abierta.

«Che, Noam, dame una mano»,
le pedí al Comqui, pero él,
me sacó remil rajando,
y me dijo: «Payador,
para temas peliagudos
referíos a su idioma,
consulte a Nené Ramallo».
La pucha, me sorprendió,
este lingüista famoso,
que traspira por Obama
y se la pasa furioso.

La cuestión es que unos giles
que de lenguaje no saben
más que robar y robar
ideas hechas por otros,
andan diciendo en voz alta,
letra grande, titulares,
que no es correta la «a»
y que entonces la Cristina,
la Dilma y la Michelle
son mujeres «presidentes».

No se puede ser tan burro
e inorar que el tiempo pasa
y quel habla es la que dita
cuándo cambia una palabra.
Si no, queríos amigos,
seguiríamos hablando
y hasta escribiendo en latín:
no les vendría nada mal
consultar el calendario
y ver que ya nos pasamos
bastante el año dos mil.

Pero son duros los tipos,
porque de hombres se trata,
plomazos, necios, dan lata
mientras el mundo se cae,
a ellos estas minucias
son cosas que les encantan.

Áhi tienen al Eliachev
que se hace el culto en la Mitre
dicendo «la presidente»
pa referirse a Cristina
y de paso darle leña
por abajo y por arriba.

Güeno, paisanos, es fácil,
agarren el mamotreto
de la RAE,* ques clarito,
y dejen de dar vergüenza
con su elegante inorancia.

Será mejor que se saquen
la careta y que confiesen,
estos lingüistas de cuarta,
que en esa «e» que no quieren
que se trasforme en «a»,
lo que no aguantan es minas
que ocupen lugares altos
pa seguirlas apaleando,
inorando e humillando.
Porque no es otro el sentío
de perder tiempo en asuntos
tan pero tan aburríos.

Urgente, les recomiendo,
pa que se puedan curar,
que se busquen terapeuta
en lo posible barato
y que lo siga a Lacán.







Porái se enteran por qué
les molesta «presidenta»
pero nunca han cuestionao, 

que se use sin dudar,
como apunta muy preciso
el gaucho Gabriel Jiménez,
la palabrita «sirvienta».



* Real Academia Española (www.rae.es).

Noviembre de 2013

1 comentario:

  1. Hola, don payador. Hace mucho que no le escribo, pero lo sigo leyendo como en el principio. Aquí comparto con usted y sus lectores un texto que habla de lo masculino y lo femenino en el lenguaje: http://bit.ly/1bVgHAZ
    Es la entrada de un blog que ando estrenando, aceptaré sus críticas.

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